‘La gente dice que no existimos’: el escándalo de los arquitectos negros excluidos

31/07/2020 | Actualidad

‘La gente dice que no existimos’: el escándalo de los arquitectos negros excluidos

31/07/20Actualidad

‘La gente dice que no existimos’: el escándalo de los arquitectos negros excluidos

31/07/20 | Actualidad

 

En Londres, una cuarta parte de los residentes son negros. Sin embargo, de las 110 firmas seleccionadas por el Consejo de la ciudad para competir por £ 100 millones en honorarios, ni una sola está dirigida por un arquitecto negro.

 

 

Fue considerada como una de las oportunidades más inclusivas de la historia, para los arquitectos, un llamado abierto y audaz para que los talentos emergentes tengan la oportunidad de ganar proyectos del sector público, el santo grial de cualquier joven aspirante a práctica profesional independiente. El consejo de Southwark declaró que su nuevo marco de servicios de diseño de arquitectos era un intento «primero en su tipo» de interactuar con una nueva generación de diseñadores diversos. Como lo expresó el concejal Leo Pollak: «Es el marco que algunos arquitectos han estado esperando durante todos sus años».

Resulta que los arquitectos negros tendrán que esperar aún más. De las 110 firmas de arquitectura seleccionadas para el panel, con la posibilidad de ofertar por £ 100 millones de honorarios de clientes del sector público durante los próximos cuatro años, ninguno de ellos está dirigido por un arquitecto negro. Sería un resultado alarmante en cualquier contexto, pero es particularmente marcado en un distrito de Londres que tiene la mayor población de habitantes negros del país, y donde más de una cuarta parte de los residentes se identifican como negros.

«El resultado fue completamente predecible», dice un arquitecto negro con sede en Southwark, que solicitó el panel. “Ni siquiera seleccionaron una práctica negra, y nunca lo han hecho en el pasado. Es lo mismo en todo Londres.

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«Ningún niño negro puede ver a nadie que se parezca a ellos ser designado para diseñar tanto como un banco de parque en su distrito «.

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Para este arquitecto, que pidió permanecer en el anonimato, el resultado es simplemente el último episodio frustrante en una larga historia de exclusión. Habiendo crecido en una propiedad del consejo de Southwark y estudiado arquitectura en una universidad de la ciudad, ahora tiene dos décadas de experiencia, incluido el trabajo en esquemas de vivienda galardonados por la RIBA, y se ha comprometido con los consejos de Londres durante años para alentarlos para ampliar la red. Sin embargo, encuentra que sus solicitudes para el trabajo público rara vez se consideran. «Es el resultado de generaciones de prejuicios inconscientes arraigados en el sistema», dice.

Southwark insiste en que su proceso de evaluación fue completamente «ciego al solicitante», y que más de la mitad de su panel de evaluación estaba compuesto por personas negras, asiáticas y de minorías étnicas (BAME). Un portavoz del consejo dijo: “El marco buscaba conscientemente eliminar las barreras que limitan la variedad de habilidades y perspectivas disponibles para usar en proyectos del sector público, y es el primer marco de este tipo para eliminar los umbrales de seguro y rotación y evaluar las prácticas más pequeñas [es decir, permitirles enviar trabajos no construidos] «. Southwark dice que se realizaron varias sesiones de seminarios web abiertos con arquitectos para ayudar a dar forma a los criterios de evaluación, y que sus compromisos de futuros más justos se consideraron en el proceso de selección. Sin embargo, de las varias prácticas dirigidas por negros que se aplicaron, ni una sola fue preseleccionada.

 

'Las autoridades públicas han fallado miserablemente' ... el topógrafo de la bola Bola Abisogun de Urbanis.
‘Las autoridades públicas han fallado miserablemente’ … el topógrafo Bola Abisogun de Urbanis.

A los ojos del supervisor Bola Abisogun, fundador de Urbanis, el resultado refleja un problema endémico en todo el sector. «Las autoridades públicas han fallado miserablemente», dice. «¿Por qué es que, en áreas donde los consejos tienen un número abrumador de propietarios de negocios no blancos, su proceso de adquisición excluye esa misma demografía?»

Abisogun ha luchado durante mucho tiempo para aumentar la diversidad en la industria de la construcción. Presidió la investigación de la Comisión de Igualdad y Derechos Humanos de 2010 sobre la discriminación racial en la construcción y produjo un informe sobre las reformas de adquisiciones en 2013. Pero siente que sus recomendaciones siguen cayendo en oídos sordos. «Los consejos siguen incumpliendo los mismos procesos», dice. “El mayor error es que han externalizado su inteligencia, confiando en asesores para contarles todo. Internamente, no tienen capacidad para comprender si lo que se les dice es correcto «.

En el caso de Southwark, el marco de arquitectura fue administrado por el especialista en adquisiciones LHC . Cuando se le cuestionó sobre la discriminación, LHC respondió: «Como práctica habitual, LHC actualmente no recopila información sobre ninguna de las características de las organizaciones que ofertan por nuestros marcos; hacerlo sería difícil para nosotros garantizar que no se establezcan prejuicios durante la evaluación».

A los ojos de muchos críticos, la imposibilidad de recopilar estos datos es precisamente el problema. Sin saber con quién están haciendo negocios, ¿cómo puede un consejo esperar asegurarse de tener una base diversa de proveedores? Las autoridades públicas del Reino Unido gastan alrededor de £ 300 mil millones cada año en la compra de bienes y servicios de otras organizaciones en todos los sectores, una cifra que crecerá a medida que el gobierno planea salir del colapso económico . Si todo ese dinero se destina a empresas de propiedad de blancos, no tendríamos forma de saberlo.

«Imagine tratar de reducir las emisiones de carbono sin contar el nivel de emisiones de carbono», dice el arquitecto con sede en Southwark. «Las autoridades públicas dicen que están tratando de aumentar la diversidad de sus proveedores, pero ni siquiera lo están midiendo».

 

Para probar su punto, presentó una solicitud de libertad de información con cada condado de Londres en 2016 para determinar si alguno de ellos había empleado alguna vez a un arquitecto negro. Ninguno de ellos podría decir que sí. The Guardian contactó recientemente a varios consejos y recibió la misma respuesta. «Cuán raramente los consejos comercian con diversos proveedores sigue siendo útilmente poco transparente», dice el arquitecto.

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«…..mientras que tienen infinitos detalles sobre qué etnias recaban qué beneficios, somos vistos como el grupo de clientes necesitados, como tomadores, no creadores «.

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Como argumenta otro arquitecto negro, cuando se trata de dar forma al entorno construido, la diversidad conduce a mejores resultados. «Este es un problema de todos», dice ella. “Se trata de crear mejores lugares para todos, diseñados por personas que consideran factores que otros podrían no ver. La sociedad está formada por personas con necesidades muy diferentes, por lo que hay mucho más que ofrecer si tienes esa experiencia vivida en tu currículum «.

La noción de un sistema inclusivo para gastar grandes cantidades de dinero de los contribuyentes no es solo una aspiración; es un deber legal. La Ley de Igualdad de 2010 otorga a todas las autoridades locales el deber de igualdad del sector público , un requisito para considerar cómo sus políticas afectan a los grupos minoritarios, incluida la «debida consideración» a la necesidad de minimizar las desventajas y fomentar la participación.

John Halford, un destacado abogado de derechos humanos, ha litigado con éxito una serie de casos en los que los organismos públicos no han cumplido con sus deberes de igualdad o han practicado la discriminación indirecta.

«En lo que respecta a las adquisiciones, los consejos deberían observar con mucho cuidado sus reglas y umbrales», dice. “Por ejemplo, si tenía una regla para aceptar solo prácticas de arquitectura que se han establecido durante 30 años, o han completado proyectos de cierto valor, entonces esa regla parece superficialmente no discriminatoria en términos de raza y género. Pero, obviamente, si observa la demografía de las firmas de arquitectura, verá rápidamente que tal regla podría excluir la mayoría de las prácticas dirigidas por BAME o por mujeres que se han establecido más recientemente o que han trabajado en proyectos más pequeños. Los criterios pueden parecer neutral en cuanto a la raza en el papel, pero cuando realmente se los prueba contra la demografía de la industria, tendrán un efecto discriminatorio ”.

 

Halford enfatiza que, según la Ley de Igualdad, simplemente tener una licitación abierta no es lo suficientemente bueno. Los consejos tienen el deber de alentar activamente las solicitudes de grupos subrepresentados también. «En una situación que históricamente ha tenido una representación BAME más baja, es de esperar que el ejercicio de adquisición tome medidas positivas para alentar a esos grupos a postularse en primer lugar», dice. «Debería ser un proceso en el que se mira para ver si hay problemas de igualdad en la forma en que ha hecho las cosas históricamente y cómo podría resolverlas de manera diferente en el futuro».

El alcalde de Londres ha condenado el resultado del marco de Southwark como «claramente inaceptable» , pero Southwark insiste en que siguió las pautas de adquisición del alcalde para la igualdad, la diversidad y la inclusión. El alcalde lanzó su propio Panel de Arquitectura, Diseño y Urbanismo en 2018, pero, cuando fue interrogado por The Guardian, un portavoz se negó a confirmar cuántas prácticas BAME o dirigidas por negros están en él. «Innovadoramente por el momento, el 5% de la puntuación se otorgó a los licitadores en función de su comprensión y compromiso con la diversidad», dijeron en un comunicado, «pero desafortunadamente eso no logró la representación comunitaria más amplia que estábamos buscando».

El concejal de Southwark, Leo Pollak, dice que está frustrado por el bajo número de prácticas dirigidas por BAME en el marco del consejo, pero atribuye la culpa a la naturaleza de la profesión de la arquitectura. «A pesar de que los arquitectos de todos los ámbitos de la vida trabajan en los planes de vivienda de nuestro consejo», dice, «sabemos que nuestro grupo de diseño todavía refleja los problemas sistémicos más amplios en la profesión que limitan la diversidad cultural de sus profesionales». Al escribir en el Architects ‘Journal , Pollak critica a una industria que está sumida en «capacitación larga y costosa, lenguaje excluyente, esfuerzos lentos para descolonizar los currículos eurocéntricos en muchas escuelas de diseño … sin mencionar una cultura de la » vieja escuela » vergonzosa y anticuada, eso aún persiste .

Todo esto es cierto, pero algunos sugieren que tal pensamiento perjudica las prácticas dirigidas por minorías que han tenido éxito contra viento y marea. «La gente dice que los arquitectos negros simplemente no existen», dice uno, «o si existen, no son lo suficientemente buenos. Definitivamente estamos aquí, solo estamos pidiendo que se les dé una oportunidad «.

Sistema orientado a 'manos seguras' ... el arquitecto Yẹmí Aládérun.
Sistema orientado a ‘manos seguras’ … arquitecta Yẹmí Aládérun.

 

Yẹmí Àlàdérun, una arquitecta que pasó de la práctica privada a trabajar para una asociación de vivienda, ha experimentado la situación desde ambos lados. «Ahora estoy del lado del cliente, entiendo cuánto riesgo tienen que tomar estos organismos públicos», dice ella. “Naturalmente, quieres ir con los muchachos que han existido desde siempre y tener el seguro de indemnización profesional masivo, el par de manos seguras que lo han hecho 20 veces antes. Pero eso significa que los nuevos arquitectos que vienen nunca tienen una oportunidad «.

Cuando vio cuántos estudiantes de arquitectura negros que vinieron después de ella lucharon por encontrar trabajo, cofundó Paradigm , una red profesional destinada a aumentar la representación de BAME en el entorno construido, y ha sido mentora de la Fundación de movilidad social y Fluid Diversity. Programa de mentoría . «He tenido suerte», dice ella. “He sido recompensado profesionalmente por trabajar duro, pero conozco a muchos que son trabajadores, pero no ven progreso. He visto a estudiantes negros salir con títulos de primera clase y todavía no pueden obtener una entrevista. Si ha realizado su Parte 1 [el primer título de tres años del curso de arquitectura] y no puede obtener ningún trabajo, ¿por qué volvería a hacer su Parte 2, y mucho menos su Parte 3 [la calificación profesional]? «

Las estadísticas educativas más recientes de la RIBA muestran que, si bien el 6,4% de los solicitantes de los cursos de licenciatura en arquitectura son negros, representan solo el 5,2% de los estudiantes aceptados. Para cuando llega a la Parte 3, los estudiantes negros que logran la calificación representan solo el 2.7% de la cohorte (87.9% son blancos), mientras que el número de arquitectos negros registrados en el Reino Unido es solo el 1% del total .

Un tutor de arquitectura establecido, que ha enseñado en una serie de antiguos politécnicos, que tienden a tener un mayor número de estudiantes de BAME, se desespera por el racismo sistemático que ha presenciado.

«Es como un culto tóxico», dice ella. “Uno de mis estudiantes más brillantes ni siquiera pudo obtener una entrevista de trabajo porque tenía un nombre africano, por lo que terminó dejando la arquitectura para trabajar en Asda. Otros han entrado en diseño web o tecnología. Si quieres tener éxito y ganar algo de dinero como persona negra, ¿por qué demonios te quedarías con la arquitectura?

Una vez que se han calificado, las posibilidades de progresión profesional también se apilan en su contra. Como el estudiante de arquitectura Shawn Adams le dijo a The Guardian : “No se ve gente negra en posiciones más altas [en la práctica]. Entras asumiendo que el cielo es el límite, pero hay un techo de cristal. Si vas más allá e intentas hacer demasiado, eres visto como un problema. Si te ajustas a la norma y tratas de no ser el mejor, estarás bien ”.

 

Akil, izquierda, y Seth Scafe-Smith de Resolve Collective.
Akil, izquierda, y Seth Scafe-Smith de Resolve Collective. 

 

Los hermanos Akil y Seth Scafe-Smith comenzaron a trabajar en arquitectura a través de una ruta diferente, por lo que pueden ver las peculiaridades de la profesión a través de una lente alternativa. Akil estudió diseño urbano, mientras que Seth había trabajado en gestión de proyectos, antes de que cofundaran Resolve Collective con Gameli Ladzekpo, una práctica de diseño interdisciplinaria que combina arquitectura, ingeniería, tecnología y arte para abordar desafíos sociales.

«La arquitectura está tan retrasada en la conversación», dice Akil, que pasó un año en un departamento de diseño urbano del consejo, donde fue el único empleado negro en su equipo. «Trabajamos mucho con galerías de arte, y todavía hay grandes desigualdades en el mundo del arte, pero hay mucha más apertura para hablar sobre estos temas». Recientemente, el colectivo celebró un evento de arquitectura pública en Zoom, que tuvo que detenerse poco después de ser denunciado por abuso racista .

Seth, quien también trabaja para un distrito de Londres, enfatiza el valor de incluir en la conversación a aquellos sin capacitación en arquitectura convencional. «La configuración del entorno construido requiere mucho más que las personas que tienen un solo conjunto de habilidades», dice. “Se trata de observar con otras miradas y cómo se valora y se accede a ese conocimiento local. Las autoridades locales deben dedicar más tiempo a comprender lo que ya tienen en su área y cómo sus propias comunidades pueden apoyarlos e inspirarlos a hacer las cosas de una mejor manera ”.

Muchos sienten que hace tiempo que falta una acción positiva. Para Abisogun, los términos de la Ley de Igualdad y las recomendaciones de innumerables informes simplemente no han tenido un impacto duradero. Los datos sobre el origen étnico se recopilaron por un corto tiempo, pero pronto se descartó como «burocracia». Señala el ejemplo de los Estados Unidos, donde, siguiendo el movimiento de derechos civiles en la década de 1960, varios estados adoptaron el principio de «apartar» los contratos para las empresas propiedad de minorías. «Al Reino Unido todavía le falta un escalón», dice. «Mucha gente no se dio cuenta de que en todo el mundo existen estrategias y políticas para intentar subir de nivel».

 

Es hora de subir de nivel ... Southwark, a la derecha, en la orilla sur del río Támesis.
Es hora de subir de nivel … Southwark, a la derecha, en la orilla sur del río Támesis.

 

Según la normativa, una ciudad puede declarar que un porcentaje del valor total de un contrato debe ir a compañías propiedad de un miembro de un grupo minoritario. La ciudad de Atlanta, Georgia , por ejemplo, exige que el 27% de los contratos de construcción deben ir a empresas minoritarias, mientras que el gobierno federal tiene el objetivo de otorgar al menos el 5% de los contratos federales a pequeñas empresas en desventaja cada año .

Tal política sería incompatible con la legislación del Reino Unido y de la UE en su forma actual, y ha habido preguntas sobre sus méritos y efectividad. «Hay un gran debate nunca resuelto sobre si el principio de las cuotas es bueno o malo», dice Halford, «sobre si el papel de la ley es eliminar la discriminación en la medida de lo posible o reequilibrar históricamente injusticias Hasta que haya un equilibrio correcto, la ley debe presionar para obtener una representación adecuada «.

El portavoz de Southwark Borough dice: “Todavía tenemos mucho camino por recorrer. La falta de diversidad en cualquiera de nuestros marcos no se solucionará de la noche a la mañana, pero es algo que estamos decididos a seguir inyectando la energía, los recursos y el tiempo necesarios para ver un cambio positivo «.

«Solo estamos pidiendo un campo de juego nivelado», dice el arquitecto con sede en Southwark. “Este es un momento poderoso para exigir un cambio real, y soy optimista en cuanto a que podamos cambiar el rumbo. Después de todo, ningún arquitecto negro ha llegado a donde está sin ser tenaz ”.

 

 

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